La Amazonia registra 136.000 incendios, la tasa más alta en casi 20 años
La deforestación en la Amazonía alcanzó cifras récord en 2024, con más de 100.000 incendios. El estado de Pará tuvo más de 57 mil focos. La deforestación en la selva amazónica alcanzó cifras récord en 2024. Nos acercamos a fin de año y el bioma ha registrado más de 100.000 focos de incendios. En los primeros 11 meses de este año, los focos de incendio en la Amazonía mostraron un aumento del 43,7% respecto a 2023. Hasta el 5 de diciembre se registraron 136.512 focos en el bioma, mientras que en el mismo período del año pasado el total fue de 98.646. El récord histórico se produjo en 2007, con 186.000 brotes registrados. La información proviene del Programa Queimadas, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE).

TE PUEDE INTERESAR
Nación refuerza la prevención y capacitación contra incendios forestales
El director de la Agencia Federal de Emergencias (AFE), Santiago Hardie, se refirió al apoyo que desde la Nación se brinda en combate de incendios. Sostuvo que la mayoría de los focos ígneos responden a intervenciones humanas y que, por lo tanto, la conciencia social es una herramienta central para reducir daños ambientales, materiales y humanos.
Más madera | Las terminales aéreas como espacios de bienestar con diseño y ambientación natural
En un mundo en el que la salud mental, el bienestar integral y la conexión con la naturaleza son cada vez más urgentes, la madera aparece como un material cada vez más elegido para transformar no solo cómo vivimos, sino también cómo nos sentimos y movemos.
El país de América del Sur que cambia la construcción gracias a un material milenario mega resistible: más que el acero
Este material que crece en América del Sur crea las construcciones más resistentes y cambia radicalmente el mundo de la arquitectura Un material de construcción en particular ha sido utilizado durante milenios por diversas culturas de América del Sur. Esto se debe a su resistencia estructural que permite crear viviendas, puentes y refugios. Su presencia arqueológica demuestra que fue uno de los recursos constructivos más valorados en zonas sísmicas y húmedas





















